La gastronomía en la televisión siempre ha sido algo que ha estado presente en mayor o menor medida dentro de las series. Normalmente hasta hace unos años simplemente era un recurso usado para evidenciar clichés, como que los policías solo comen donuts y perritos calientes. Como recurso para crear alguna situación cómica o como simple medio para el emplazamiento publicitario (botellas de coca cola, cajas de cereales, cartones de leche, comida rápida etc...). Desde hace unos años esto ha ido cambiando y aunque también se sigue usando para los propósitos anteriores, ahora se usa más y de una forma que podríamos calificar de más profesional.
Creo que dos son las causas principales de este hecho: El boom gastronómico que desde principios de los noventa se esta viviendo en todo el mundo y que cada vez estamos viendo unas series que tanto en su temática como en su realización están muy próximas al cine y éste ya usaba este recurso gastronómico desde hace tiempo.
En las sitcoms, la comida y la bebida dan muy buen pie a esas situaciones cómicas a las que antes me refería. Friends es quizás el ejemplo perfecto. El personaje de Monica, chef de cocina, se pasaba media serie entre fogones y eran muchas las tramas cómicas donde la cocina era parte importante. El capitulo de la cena de acción de gracias con Rachel haciendo aquel pastel con carne, guisantes, mermelada y nata es memorable. Como decía se sigue usando con esa bis cómica pero si nos fijamos se hace más hincapié en productos, recetas, tipos de vinos etc...
Aunque gastronómicamente hablando, el boom creo que llega con ese acercamiento cada vez más notorio de las series al cine. El cine, desde hace años viene usando esos momentos gastronómicos para dotar de mayor realismo las tramas y sobre todo para hacer que los personajes se nos hagan más cercanos, incluso simpáticos e identificarnos de alguna manera con ellos a través de la comida y la bebida. Personajes que de otra manera nos resultarían casi como de otra galaxia.
La clase de como hacer una buena salsa para los espaguetis con albóndigas impartida por un matón en El Padrino, las manitas de Sofia Coppola y Andy García mientras hacen ñoquis para los guardaespaldas en la tercera parte también de El Padrino o usar la comida y la bebida como signo de poder dentro de la cárcel en Uno de los Nuestros son algunos ejemplos.
Son las series dramáticas las que mejor han sabido coger esa esencia cinematográfica y las que mejor usan la comida y la bebida en sus tramas. Vemos personajes cada vez más entendidos en el tema, famosos cocineros pululando por algunas series y sobre todo nos acerca a los personajes, recordarnos que no son tan diferentes a nosotros y humanizándolos.
Tony Soprano comiendo sobras de pasta de la nevera o haciéndose el entendido sobre vinos y espirituosos (Como hacen muchos). El agente Cooper devorando tarta de cereza y café, las chicas de sexo en nueva york cotilleando entre platos de los mejores restaurantes de Nueva York o los camellos de The Wire devorando Mcnuggets y discutiendo sobre como estarán hechos y quien los inventaría. En fin hacer más real la ficción.
Lo de Treme es un caso a parte que trataré otro día mas extensamente porque su conexión gastronómica esta a un nivel que nunca había visto en una serie.
La televisión es un medio capaz de crear tendencias, lo hemos visto con la moda, también lo vimos hace años cuando a raíz de Falcon Crest descubrió a los profanos en el tema que en Estados Unidos no solo se hacía coca cola. Pero también tiene la virtud de adaptarse a las tendencias actuales y usarlas para su propio beneficio. Y con la comida y la bebida lo están haciendo perfectamente.
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