Lo que hasta ahora parecía impensable, que dos de los estrenos de la NBC estuvieran entre mis preferidos de la temporada, se está cumpliendo. Después del gran estreno de Smash, esta semana la cadena del pavo nos sorprendió de nuevo con el preestreno en su web de otra de sus grandes apuestas de esta temporada, Awake.
Awake gira en torno a Michael Britten (Jason Isaacs) un detective de homicidios que tras un accidente de coche vive dos realidades paralelas. En una su hijo, Dylan Minnette (Lost), ha fallecido en el accidente. En la otra es su esposa, Laura Allen (Terriers), la que muere. Está con su esposa van a dormir y cuando despierta está solo en la cama y es su hijo él que sigue vivo.
La forma en que la serie nos muestra estas dos realidades es fantástica, menos confusa de lo que podríamos pensar en un principio y con unos detalles y unos personajes que me han encantado. En las dos realidades tiene los mismos compañeros en la policía con roles diferentes, Steve Harris (El Abogado) entre ellos . Y en las dos debe visitar a un terapeuta, que esta vez sí son diferentes, y que en cada realidad le intentan hacer ver que la otra vida es un sueño. Con unos discursos que no hacen otra cosa que engancharte aún más a la serie.
Awake no es una serie que muestre esas dos realidades y ya está. Toma partido usando diferentes tonalidades de color en una y otra vida. También el carácter y comportamiento de Isaacs es diferente cuando está con su mujer o con su hijo. Jugando con el espectador, como queriéndote señalar cual de esas dos vidas es la autentica y cual es un sueño, aunque sin dejarlo claro por completo. Y todos esos pequeños detalles y matices están por todo el piloto.
Además los casos en los que trabaja como inspector de homicidios se relacionan entre si en esas dos supuestas vidas, haciendo que las pistas de un caso le ayuden a resolver el caso de la otra realidad. La serie seguirá ese camino, con una parte de procedimental policíaco bastante buena, aunque en principio, menos interesante que cuando lo vemos en el ámbito familiar. Es en ese ámbito privado, ya sea con su familia o con los terapeutas cuando la serie echa el resto.
Los actores están perfectos y Isaacs hace una actuación que dará mucho que hablar, señalando esos matices y esos comportamientos de los que hablaba antes perfectamente. Junto a él los terapeutas son los personajes que mejor están y que más llaman la atención, Cherry Jones (24) en una vida y BD Wong (OZ) en la otra. La forma en que esta filmada también es muy buena, con un punto cinematógrafo y un uso de la cámara que acentúa la parte dramática y misteriosa de la serie.
Me ha encantado. Una serie que mezcla perfectamente varios estilos, drama, suspense, misterio, fantasía y algo de acción para hacer un conjunto casi perfecto. No voy a emocionarme mucho porque me faltan dedos para contar las series con grandes pilotos que luego se han desinflado por completo, pero de momento la seguiré viendo seguro. El único pero es el pelo de jason Isaacs, me recordaba demasiado a Hilario Pino...
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