Desde que vi The Wire siempre pensé, que a parte de ser una de las mejores historias que he visto jamas en televisión, era una serie que tenia un conjunto de actores como pocas veces se han visto. Y entre todos ellos uno de mis preferidos siempre fue Idris Elba que interpretaba al mítico Stringer Bell. Siempre me pareció que sus actuaciones eran memorables, sobre todo porque es uno de esos actores en peligro de extinción que con un gesto, una mirada o una mueca dicen más que la mayoría de actores en diez frases y eso creedme, no es nada fácil.
Con Luther, serie emitida por la BBC One, Elba ha llevado su actuación a otro nivel (Nominado como mejor actor a los Globos De Oro) metiéndose en el cuerpo de un detective de la unidad de delitos violentos de la policía de Londres. Un detective con graves problemas para controlar su ira, algo que le meterá en serios problemas. Pero precisamente es esa furia incontrolable la que le hace conectar de una forma especial con la mente de los asesinos en serie y psicópatas a los que persigue. Consiguiendo resolver los casos pensando y actuando como ellos y es que la linea que separa a John Luther de los asesinos a los que persigue ya la ha cruzado en alguna ocasión.
Tampoco hay que perder de vista en esta serie al personaje de Alice Morgan, interpretado por Ruth Wilson (The Prisioner), una psicópata que logra escapar de las acusaciones de Luther por haber asesinado a su familia, pero que entablara con él una enfermiza relación en la que cada uno completa el carácter oculto del otro, llegando a entablar una extraña amistad.
Luther es una de las mejores series de estos dos últimos años. Una serie muy británica, con muy bueno guiones, creados por de Neil Cross (Spooks), con algo acción, un gran ritmo, suspense y buenas dosis de thriller psicológico que junto con la banda sonora (Paradise Circus de Massive Attack), la ambientación de los bajos fondos londinenses y la oscuridad que desprende la hacen perfecta.
Otra cosa que hace especial a esta serie es que dentro de una trama general, los casos se resuelven cada dos capítulos. Alejándose así de los procedimentales estadounidense y acercándose más a un estilo tipo film muy de moda en las series y miniseries europeas. (Millenium, Strike Back, Red Ridding, Wallander).
Su único pero, es que se hace corta y es que solo cuenta con seis capítulos en su primera temporada y con cuatro en esta segunda temporada, que acaba de finalizar. Eso si, no hay ni un segundo de relleno en las tramas.
La primera temporada es espectacular, mostrando la relación de Luther con su entorno laboral y personal y sobre su recién iniciada relación "Especial" con Alice, esta temporada tiene unas tramas quizás algo más blandas en lo laboral pero mucho más interesantes en lo personal.
En cambio la segunda temporada es mucho más oscura, mostrándonos la especial conexión que tiene Luther con esos asesinos a la hora de atraparlos, aunque también se en esta temporada donde Luther se muestra más humano con sus relaciones y las personas que le rodean.
Muy recomendable, seguro que serán diez de las mejores horas que habréis empleado viendo la televisión actual.
Trailer Luther:
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